Después del lanzamiento de su EP debut ‘De las cenizas resurgimos’ y de su sencillo en video ‘Melancolía’, la banda colombiana de punk rock/pop punk Sin Escrúpulos, conformada por David Jaramillo García en la batería, Daniel Alejandro Restrepo en el bajo, Juan Sebastián García Valencia en la guitarra líder, Juan Pablo Cardona Henao en la guitarra rítmica y David Lastra Úsuga en la voz, ha experimentado un constante crecimiento reflejado en las reproducciones en sus plataformas digitales, seguidores en sus redes sociales y participando en festivales y convocatorias locales en su natal Medellín.
“Cada vez más nos conectamos con personas que disfrutan de nuestra música, lo que es verdaderamente emocionante. Hemos tenido la oportunidad de conectar con medios y público de Colombia, México, República Dominicana y Panamá, permitiéndonos llevar nuestro mensaje y canciones a nuevos horizontes. Este proceso nos permite seguir soñando con los pies en la tierra y nos motiva a seguir trabajando duro», comenta la banda.
La canción cuenta con un Lyric Video que captura la esencia emocional del protagonista de la historia a través de una obra audiovisual evocativa y en constante evolución. El concepto busca explorar los diferentes estados emocionales por los que atraviesa el personaje, desde su desorientación inicial hasta su posterior evolución y transformación.
“Nos esforzamos por transmitir estos cambios y emociones al espectador para que pueda sentirse identificado y sumergirse en la historia junto con el protagonista. En resumen, queremos crear una experiencia audiovisual emocionalmente rica y satisfactoria para el público», cuenta los integrantes de Sin Escrúpulos.
‘Sentencia de Muerte’ tiene la capacidad de conmover a las personas en distintos momentos de sus vidas. En ocasiones, en momentos difíciles donde sentimos que nuestra existencia carece de relevancia, cuando nos encontramos solos y poco importantes o incluso cuando estamos lidiando con la dureza de la vida. Esta canción relata los momentos por los que todos pasamos, pero que muy pocos se atreven a hablar.